Desde que asumió el gobierno de Javier Milei, uno de los sectores que más se derrumbó es la Construcción. Para conocer el impacto del freno a la obra pública y otras medidas de ajuste, en Agenda Pyme radio conversamos con Gerardo Fernández, presidente de la Confederación de Pymes Constructoras de la República Argentina.

«El gobierno no concretó su anuncio de concluir la obra pública que estaba avanzada, y la situación se agravó», sostuvo  Fernandez y comentó que en enero la entidad que preside tuvo una reunión con el secretario de Vivienda y se acordó concluir las obras que estaban avanzadas. Eso no ocurrió y cambiaron al secretario de Vivienda. «Pedimos una reunión con el nuevo funcionario a cargo, y a casi 6 meses de suspendidos los pagos, hay muchas empresas que están presentando concurso preventivo de acreedores. La situación es dramática», describió.

«Por ley de obra pública, las empresas tienen la custodia de los terrenos donde van a realizarse. Hay empresas que están pagando seguridad y servicios por varios millones mensuales sin cobrar nada desde agosto. Eso rompió la cadena de pagos», comentó Fernández.

«La obra pública se inspecciona mientras se ejecuta, y hoy hay obras abandonadas que han sido ocupadas o vandalizadas», advirtió.

«Este gobierno elegido por el voto popular, había advertido que no hará más obra pública», recordó el directivo de las pymes constructoras.

Además, «hay un problema de inseguridad jurídica» porque los contratos siguen vigentes. El gobierno no los rescindió ni pagó por la obra ya hecha, comentó. «No se puede dejar a una empresa en custodia de una obra, sin pagarle las facturas vencidas hace seis meses».

Los empresarios pymes están agobiados. Mucha gente piensa en «la casta», y acá se está castigando a los empresarios que se levantan todos los días a las 6 de la mañana para ir a una obra y darle trabajo a la gente. Si hay cuatro vivos que hicieron negocios con la obra pública, esos deben ir presos», sostuvo Fernandez.

La caida de venta de materiales, ronda el 60 al 80%. Eso se traduce en menos Ingresos Brutos para las provincias y empleos perdidos.

La obra pública representaba el 40% de la actividad del sector. Y hoy la obra privada también se ha resentido, por falta de acceso al crédito, describió Fernández.

En cuanto al Fondo de Desempleo para los trabajadores de la Construcción, este se conforma por descuentos que se le hacen al trabajador mientras trabaja y se cobra por única vez. Con los niveles de inflación que hay, muchos ya no tienen nada y tomaron créditos. La gente está colapsada y usó ese fondo para pagar deudas.

«Para las pymes, su principal capital de trabajo es la gente. Los empresarios prefieren vender una máquina o un vehículo antes de desprenderse de gente que les costó formar», comentó Fernández. «En algunas provincias los trabajadores dejaron la obra y se fueron a cosechar, pero en invierno no hay actividad y será muy duro», señaló.

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