Desde la asociación que nuclea a los heladeros anticipan cierres de comercios y pérdida de puestos laborales al efectivizarlo en plena temporada de verano, la época que los heladeros esperaban para sobrevivir luego del peor año e invierno del sector.
Debido a las posibles restricciones de circulación y cierre de locales gastronómicos a partir de las 23h, la Asociación Fabricantes Artesanales de Helados y Afines (AFADHYA), expresó la “profunda preocupación” del impacto que podría generar la disposición en el sector heladero.
La Asociación entidad que nuclea a los heladeros artesanales de Argentina anticipa el cierres de comercios y pérdida de puestos laborales al efectivizarlo en plena temporada de verano, la época que los heladeros esperaban para sobrevivir luego del peor año e invierno del sector.
“Desde que comenzó la pandemia y con cada una de las fases y etapas, acompañamos desde nuestros comercios todas las normas e incitamos a los clientes a respetar y cumplir con todos los protocolos. En nuestros locales siempre se ha cumplido con las normas de higiene, seguridad y distancia social. Pasamos como pudimos este año, resistiendo al peor invierno en nuestros locales, cuidando las fuentes de trabajo de nuestros colaboradores. De ser efectivas las medidas, tememos por el cierre de heladerías, por la pérdida de fuentes de trabajo y nos vemos sumamente afectados por estas restricciones. El sector gastronómico fue uno de los más devastados por la pandemia. Impulsar estas medidas nuevamente traerá a nuestros comercios daños económicos irreparables. Será un golpe muy duro para todos los colegas”, sostuvo Gabriel Famá, Presidente de AFADHYA.
Por otro lado, destacó que si el toque sanitario se hace efectivo y se recurre nuevamente la ayuda del Estado para los comercios, el sector no podrá “sobrevivir de esta manera”. “Estamos dispuestos a revisar e intensificar los protocolos que sean necesarios, pero no podemos cerrar nuestros locales a las 23h. Las heladerías, y más en verano, cierran sus puertas varias horas después de las 00hs, y es fundamental poder vender en mostrador y por delivery hasta el cierre y por supuesto, permitir que el personal pueda trasladarse a sus hogares. Los colegas coincidimos en que ya estamos en un momento donde no se pueden cerrar los locales y que debemos entre todos cumplir con todos los protocolos para que los comerciantes podamos vender y los clientes puedan consumir con responsabilidad nuestros productos. No hay aglomeraciones en nuestros locales, no somos culpables, queremos trabajar como corresponde y sin restricciones de horario. No queremos cerrar nuestras heladerías y menos aún dejar a gente sin trabajo”, concluyó Famá.