En diálogo con Nino Fernández, por Agenda Pyme, Nicolás Santos, fundador de la pyme Fibercorp, que produce fibras textiles en la localidad de Berazategui, se refirió a la realidad del sector.
«A partir del 20 de marzo, con la cuarentena, interrumpimos las actividades. Cuando se levantaron las restricciones para exportadores, a fin de abril empezamos a operar. Nosotros exportamos más del 80% a automotrices de Brasil. Pero ahí nos encontramos con una restricción de demanda. Hoy estamos en un 30 o 40%.
Santos contó que tiene 130 empleados y recurrió a los ATP para pagar salarios. «Los ATP tienen un tope. El resto lo cubrimos nosotros. Sin tener ingresos por facturación, cuesta capitalizarse para cuando la actividad arranque», señaló.
«Nuestros hilados se utilizan como refuerzo del caucho en neumáticos. Exportamos principalmente a Brasil», explicó.
«Venimos con un tema de competitividad sistémico, que no se resuelve con devaluaciones. Necesitamos revisar la estructura impositiva de Argentina, porque así terminamos exportando impuestos, y el mundo no compra impuestos», destacó.
Al referirse a la situación del mercado internacional señaló: «es una jungla. Con la pandemia todas las empresas empezaron a acumular stock y hoy lo están tratando de liquidar para conseguir caja, con lo cual los precios se derrumban. Tenemos que ser competitivos para poder exportar… va a haber un mundo más proteccionista y para algunos productos, con el mercado interno no alcanza».
«Para traer dólares, hay que ser competitivos para exportar», subrayó y al referirse a los anuncios del gobierno por del Día de la Industria, sostuvo: «Es bueno escuchar a un gobierno que tiene una política industrial con medidas de corto y largo plazo».
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