El gerente de la Cámara Argentina de Gas Natural Comprimido (CAGNC), Roberto Riesco, pasó por Agenda Pyme Radio el jueves 26 de mayo para brindar un panorama de la situación del sector.
La Cámara representa a las principales empresas del sector, desde quienes fabrican compresores, kits de conversión de vehículos y las estaciones de servicio que ofrecen GNC.
«La industria del GNC local no ha tenido mayores inconvenientes de desabastecimiento. Somos una industria silenciosa, porque no estamos en los medios. Se habla cuando aumenta la nafta y el gasoil y nunca se habla del GNC. Argentina es un país gasífero con petróleo y no al revés», destacó Riesco.
«El gas es un tema relegado en Argentina. En el norte y otras partes del país se siguen usando garrafas. Es imperioso que se haga el gasoducto de Vaca Muerta que va a proveer de gas al AMBA. Tenemos una enorme riqueza de gas, y tenemos litio», sostuvo.
«Estamos en una coyuntura de guerra y nos falta una planificación e inversiones en infraestructura para la extracción de las riquezas».
En cuanto a las ventas de GNC, «hay un 40% de diferencia de costos, que hace posible que haya taxis, remises y fletes en la calle. Es increíble que los colectivos y micros de pasajeros, teniendo toda la (cadena de valor de) la industria local, a nadie se le ocurra una conversión de gasoil a GNC», destacó. «Acá hay intereses gigantescos. Hubo una enorme campaña diciendo que quien ponía GNC, el motor se fundía o que si transformás un vehículo, perdés la garantía».
«El Fiat hizo el Siena con GNC de fábrica, y con otras marcas se puede pedir a la fábrica, pero tarda seis meses», apuntó.
«Tenemos este recurso y podríamos exportarlo, pero faltan políticas. En exposiciones de vehículos en Europa y Estados Unidos, vimos micros con GNC que tenían un triángulo indicando que era menos contaminante para el ambiente. El GNC es la tecnología actual menos contaminante. Los vehículos eléctricos son el futuro, pero tienen el problema del reciclado de la batería», señaló.
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