Desde Focus Market elaboramos el siguiente Informe donde mostramos los ahorros generados en primeras y segundas marcas en oferta, promoción o descuento así como la distorsión en los precios que hace que encontremos el mismo producto en diferentes establecimientos con diferencias de hasta el 50%.
«En nuestro país para muchas familias el gasto corriente está por encima del ingreso en un contexto de variación de precios de la economía. Es decir, que adelantar las compras y evaluar el lugar de compra puede llegar a generar ahorros de hasta el 50%. Un ahorro en la compra de bienes de este tipo en muchos casos irá para el pago de servicios públicos y privados debido al constante aumento que están teniendo por corrección de los precios relativos de la economía y necesidad de eliminar subsidios nacionales para alcanzar equilibrios fiscales a nivel nacional» indicó Damián Di Pace Director de la Consultora Focus Market
Mes a mes, las familias argentinas se enfrentan a sus gastos, algunos fijos y otros variables para la subsistencia de una administración hogareña cada vez más compleja. Entre los gastos fijos se incluyen los alimentos y bebidas de la canasta básica. A diferencia de otros países, en Argentina se convive a diario con la inflación, lo que lleva a los argentinos a ingeniárselas a la hora de comprar, buscar precios, aprovechar ofertas, comprando al por mayor, recurriendo a los descuentos, entre otros.
¿Cuánto podría ahorrar una familia tipo (compuesta por un varón de 35 años, una mujer de 31 años, un hijo de 6 años y una hija de 8 años) comprando los productos que integran una Canasta Básica Alimentaria (CBA) con descuentos por unidad? Para responder a esta pregunta, realizamos un relevamiento en tres grandes cadenas de supermercados, tomando en cuenta las ofertas y promociones vigentes del 18 al 24 de marzo. Los productos relevados fueron los mismos que mide el INDEC, incluyendo tanto primeras marcas como segundas marcas.
El valor de la CBA para la familia mencionada, en febrero de 2024, alcanzó los $322.851,20, aumentando un 13,1% respecto al mes anterior y un 301,1% interanualmente. Estimando el valor de la canasta para marzo de 2024, se la ajusta por la inflación esperada del mes, resultando en un valor de $369.018,93. Si una familia fuera al supermercado «B» a hacer sus compras en el mes, llevando productos de primera marca y sin promociones, gastaría $346.439,83, lo que representa un 6,1% menos sobre el valor estimado de la CBA para marzo. En tanto, se ahorraría mucho más si aprovechara las promociones o descuentos por unidad, ya que solo gastaría $325.866,56, lo que equivale a un ahorro del 11,7%.
Entre los supermercados relevados, existen diferencias significativas. En el supermercado «A», la familia gastaría un 9,3% más sobre el valor de la CBA, es decir, $403.403,28, si compramos productos sin promoción. Sin embargo, si aprovechamos las promociones, tendría un valor similar al de la canasta, $367.710,82. En el caso del supermercado «C», aunque comprando con y sin promociones la familia ahorraría, este ahorro es mayor en la canasta de productos sin promociones, representando un 12,1% sobre el valor de la CBA de marzo en comparación con el 2,7% de los productos con promoción.
Fuente: Focus Market
Otra estrategia de ahorro por parte de las familias es optar por comprar productos de segunda marca. En promedio, comprando con y sin promociones, una familia ahorraría hasta 18,1% y en promedio 7,6% en productos de segunda marca, mientras que en productos de primera marca ahorraría hasta 12,1% y en promedio un 3,9%. El supermercado donde el ahorro es mayor es en el «A», haciendo uso de las promociones, seguido por el supermercado «C»; mientras se gastaría un 4,2% más comprando en el supermercado “B” sin promociones.
Fuente: Focus Market
Otra diferencia a tener en cuenta es la brecha de precios existente en los mismos productos comercializados en los distintos supermercados considerados durante el relevamiento. Por ejemplo, en el arroz varietal existe una brecha del 36,4% entre el precio más alto y el más bajo; en las lentejas es del 41,5%; en la picada especial es del 49,9%; en el vino, del 41,2%; y en el asado del medio, del 27,6%.
Fuente: Focus Market
La adaptabilidad frente a la inflación y la búsqueda activa de descuentos y promociones se vuelven imperativas en las familias para garantizar un manejo financiero eficiente y la adquisición de productos básicos. Los datos muestran que, si bien existen variaciones en los precios según el supermercado y la modalidad de compra, aprovechar las promociones por unidad puede representar un ahorro significativo para las familias. Además, la opción de productos de segunda marca también puede contribuir a reducir los gastos.
«Uno puede aprender mucho de la distorsión macro en sus resultantes en la micro. Los excedentes monetarios hicieron cada vez con más frecuencia con los ingresos obtenidos por el tiempo de los argentinos dedicados al trabajo tengan que dedicar luego tiempo para ahorrar en sus consumos adelantando compras, visitando diferentes puntos de venta, aprovechando promociones, ofertas y descuentos. Lo que calienta la inflación en materia de precios es el resultante del fuego en materia de circulación monetaria. Lo que la inflación quema en el poder adquisitivo de los pesos incendia las posibilidades de ahorro presente para mayor nivel de inversión, producción, empleo y niveles de capitalización futura. Lo que pasa en un changuito de supermercado puede explicar muy bien lo que sucede en la previsibilidad de juego con la moneda para el que el produce, distribuye, comercializa y consume», detalló Damián Di Pace Director de la Consultora Focus Market