A partir del DNU 70/2023 que entró en vigencia a fines del año pasado, se elimina la capacidad del Ministerio de Salud de la Nación de fiscalizar y garantizar la razonabilidad de las cuotas y los planes prestacionales, algo que las compañías de medicina prepaga aprovecharon para aumentar (en algunos casos más que duplicar) sus cuotas.
En tanto, al equipararse con las Obras Sociales, las prepagas tendrán que aportar un 20% del dinero que reciben en el llamado Fondo Solidario de Redistribución, para financiar en el sistema de obras sociales, la cobertura de prácticas y tratamientos médicos de alto costo, destaca un informe del portal comparativo de prepagas Elegirmejor.com.ar
Por otro lado, la introducción del mecanismo de “libre opción” que permite a los trabajadores elegir una obra social diferente a la de su actividad, o una prepaga (sin esperar un año, como ocurre ahora) para derivarle directamente sus aportes «conduce a la ruptura definitiva de los mecanismos solidarios que prevalecían al interior y entre las obras sociales. Y a su vez promueve y fortalece procesos de mayorconcentración y de transferencia de recursos del sector público al privado».
Según un análisis de la Red de Investigadores e Investigadoras en Salud (RAIIS), «tanto obras sociales como prepagas podrán decidir qué porcentaje de los aportes de sus afiliados destinan a la prestación de servicios de salud y cuál a otros negocios financieros, como sucede en los EEUU donde el sector salud se convirtió en uno más del complejo financiero de los seguros, en el que la rentabilidad del capital es alta, mientras que la cobertura de salud es desigual».
En cuanto a la desregulación en el mercado de farmacias, desde la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA), adviertieron que esto pone en riesgo a las farmacias independientes y la función social que cumplen en lugares alejados y despoblados del interior del país.
Finalmente, la desfinanciación de la Ciencia y la investigación, pone en riesgo el desarrollo de medicamentos y vacunas para enfermedades «poco rentables» de gran prevalencia en el país.
Durante estos primeros meses de 2024 Argentina está atravesando la mayor epidemia de Dengue de la historia, con más de 50 mil casos confirmados (vs. algo más de mil durante igual período del año pasado). Existe una vacunas disponible y aprobada por ANMAT a fines de 2023, pero el ministerio de Salud a nivel nacional, cuyo funcionario a cargo no ha realizado ni siquiera alguna declaración al respecto, ni siguiera se ha reunido con infectólogos y expertos para definir acciones para enfrentar esta crisis sanitaria.