En Agenda Pyme Radio conversamos con el economista Jorge Vasconcelos, investigador del Instituto Ieral de Fundación Mediterránea (entidad que preside Carlos Melconián), sobre la coyuntura económica y el «plan de dolarización».

Hay que diferenciar dos fenómenos, que están relacionados: uno es la presión inflacionaria por la emisión monetaria y el déficit fiscal que no se logra financiar en forma genuina. Esa es la base del problema. Una vez que la inflación alcanza niveles de más de 10% mensual, viene el problema de los contratos. Si demorás más de 30 días en pagar, hay serios prejuicios en las cadenas de pagos. Hoy no está previsto pactar contratos que permitan actualizar el verdadero valor de lo que se facturó.

En el campo, aún en los peores momentos de la hiperinflación del 89, la actividad no se paró porque los contratos son en quintales de soja. Si tengo que pagar fertilizantes, semillas y agroquímicos, lo pactamos en quintales de soja. Cuando cosecho, devuelvo en quintales.

«Lo que pasa en otros rubros como los alquileres urbanos, habiendo un primer ajuste a 12 meses, eso retrae la oferta. El tema del bimonetarismo tiene que ver con esto», señaló el economista.

Respecto de la propuesta del espacio de Juntos por el Cambio de «abrir el comercio exterior», Vasconcelos señaló: «hoy tenemos una fábrica de trabas. El problema no es solo que te autoricen la importación mediante las SIRAS, sino que te den los dólares para pagar… Eso como mínimo tiene que volver a la situación anterior, con un espquema de licencias automáticas y no automáticas, que es más simple que el enjambre actual. El problema es si hay dólares para pagar la importación», señaló y sostuvo que  «no va a haber posibilidad de que en el Mercado Único de Cambios haya dólares para ahorro o turismo, porque no hay dólares ni reservas suficientes. Y para el Comercio Exterior debería haber contrapartida para cumplir con los compromisos con proveedores extranjeros».

«Lo que vino ocurriendo es que por fijar un tipo de cambio debajo del punto de equilibrio, el Banco Central pierde dólares en forma sistemática», destacó.

Respecto al ingreso de Argentina a los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), Vasconcelos apuntó: «El comercio exterior entre los países de ese bloque no se modificó desde que se creó la sigla. Brasil no le está exportando más a Rusia o a China», señaló.

«Sería más útil un acuerdo entre Argentina  y la Unión Europea. Y desde el punto de vista del financiamiento. Si se compara la tasa de interés del Banco de los BRICS con la de otros organismos multilaterales, es más alta. Desde lo técnico no hay muchas ventajas de incorporarse a ese club», sostuvo.

«Llevamos 12 años de estanflación. Pero hay sectores que si se le quitan trabas para importar o tomar personal, tienen potencial de crecimiento cercano, como la cadena de proveedores del litio y Vaca Muerta, con Pymes y MicroPymes en sectores muy diversos; también sectores como el software frenado por la brecha cambiaria porque los especialistas prefieren trabajar para el mercado exterior; y en el caso del turismo, por la falta de conectividad», señaló. «Tienen el motor encendido con el freno de mano puesto por las regulaciones excesivas», describió. «Si eso se destraba habría un cambio muy rápido». «Brasil está mejor en términos económicos y eso es fundamental para Argentina», concluyó.

 

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