El documento de trabajo se funda sobre los distintos aspectos de las relaciones de consumo, con recomendaciones para lograr prácticas equitativas, respetuosas del trato digno y no discriminatorio.
La Secretaría de Comercio Interior presentó una “Guía de buenas prácticas” para que las empresas adopten la perspectiva de género en sus procedimientos comerciales.
“Frente a la necesidad de abordar la doble desigualdad que enfrentan las mujeres y diversidades en las relaciones de consumo, primero como consumidoras/es y, además, por su condición de género u orientación sexual, el documento tiene por objetivo lograr relaciones de consumo más equitativas”, puntualizó el organismo.
Según la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, con la creación de esta guía “nos proponemos darles a las empresas los instrumentos que necesitan para que adopten la perspectiva de género a sus prácticas comerciales y que, gracias a esto, se genere una verdadera transformación en las relaciones de consumo”.
Se trata de la “Guía de Buenas Prácticas en las Relaciones de Consumo con Perspectiva de Géneros”, que, según Comercio Interior, continúa en desarrollo y es impulsada por esa Secretaría, el Gabinete de Género del Ministerio de Desarrollo Productivo y el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad.
“Surge a partir de la necesidad de abordar la doble desigualdad que enfrentan las mujeres y diversidades en las relaciones de consumo, primero como consumidoras y además por su condición de género u orientación sexual. De esta manera, desde el Gobierno nacional se comprende que la atención que debe dársele desde el Estado es mucho mayor y contar con una permite seguir cimentando una sociedad más igualitaria y democrática”, resaltó Comercio Interior, en un comunicado.
Durante la presentación de la guía, que se realizó este martes de manera virtual, se presentó el documento de trabajo que se funda sobre los distintos aspectos de las relaciones de consumo, con recomendaciones para lograr prácticas equitativas, respetuosas del trato digno y no discriminatorio.
También, aborda cuestiones como la información, los rotulados, la publicidad, los formularios y contratos, y demás prácticas relativas a la salud, a la seguridad y a las condiciones de atención y trato.
La Secretaría recordó que se viene trabajando en ese sentido a partir de diversas imputaciones a empresas por incumplir el trato digno o restringir el acceso al consumo por cuestiones de género u orientación sexual.
Además, se formó un equipo de abogados que se encarga especialmente de tomar aquellos reclamos de consumidoras y consumidores hipervulnerables para brindarles un tratamiento prioritario.