El confinamiento a raíz del COVID-19 restructuró la vida de los argentinos: más tiempo en casa y uso intensivo del hogar. ¿Pero cómo impactó esto en los roles tradicionales de género y el trabajo hogareño no remunerado? Un estudio de la consultora Kantar indagó sobre esto
Más argentinos y argentinas se encuentran realizando tareas de limpieza y cocina durante la cuarentena” -dijo Solana Renosto, Ejecutiva de de Kantar-. “Sin embargo, la actividad que más crece -por la suspensión de clases- es el cuidado de los hijos, que llega a acaparar un 20% más de tiempo en comparación con lo que sucedía antes del aislamiento obligatorio.
Un tercio de los entrevistados (33%) transita este escenario doméstico en convivencia con el teletrabajo. Los hombres incrementaron su participación en las tareas domésticas, aunquelas mujeres siguen liderando estos roles: mientras 8 de cada 10 varones dijeron participar de la limpieza, el cuidado de los chicos o la cocina, prácticamente el 100% de las mujeres las realizan. “Los hombres menores de 35 años son los más dispuestos a realizar los trabajos del hogar, mientras que a mayor edad la tendencia llega con menor fuerza, decreciendo más en el interior del país” -observa Estefanía Lestanquet, de la misma consultora.
Tanto mujeres como hombres reconocen que son “ellas” las que mayormente se encargan de organizar las tareas del hogar y el cuidado de los hijos. Y, en un escenario donde las actividades cotidianas se intensifican, las mujeres declaran tener menos tiempo libre, mientras que los hombres disponen de mayor tiempo ocioso”.
Si bien el 63% de los encuestados creen que no cambiará la distribución de tareas del hogar y cuidado luego del confinamiento, entre los jóvenes aparecen mejores perspectivas.
«Esta es una oportunidad para que las marcas comuniquen una realidad donde las tareas cotidianas y el cuidado de los hijos se intensifican, y muestren figuras masculinas brindando más que una “ayuda” una real participación y, al mismo tiempo, a una mujer que no esté obligada a poder con todo” destaca Estefanía Goren, también de Kantar.
