El Club 17 de Agosto de Villa Pueyrredón, se convirtió en una gran despensa de alimentos para poder de ese modo recaudar fondos que le permitan pagar los sueldos del personal. Cómo el resto de los clubes de barrio, hace más de dos meses que está sin actividad y sin ingresos. «La ayuda del Estado no alcanza y lo que se viene es aún peor si tenemos en cuenta que el deporte y los clubes van a seguir en estricta cuarentena», señaló Andrés Sanguinetti, socio del club.
Tags: club de barrio clubes