Con más de 600 establecimientos productores y bares cerveceros a lo largo del país y 6.300 empleos, las cervecerías artesanales tienen menos del 2% del mercado de esta bebida. Sin embargo, la crisis por el Coronavirus asestó un golpe mortal a este sector que, luego de un momento de auge, en los últimos dos años venía cayendo en producción y ventas.
Según una encuesta de la Cámara de Cerveceros Artesanales Argentinos, 9 de cada 10 productores tuvieron un derrumbe del 90% en sus ventas desde el 16 de marzo, cuatro días antes de que empezara la cuarenta obligatoria. El 80% de las empresas vende casi la totalidad de su producción a bares y restaurantes que debieron cerrar sus puertas.
Cinco de cada 10 productores estiman que no podrán cobrar la mitad de los productos ya vendidos. Y 3 de cada 10 declara que la mitad de sus clientes no volverán a abrir sus locales después de la cuarentena. El 75% tenía deudas previas a la aparición del coronavirus, y la mayoría declaró que debió cortar la cadena de pagos.