La producción de las Pymes Industriales cayó 0,3% en enero 2020 frente a igual mes del año pasado. Es la menor tasa de caída anual en 20 meses, según la Encuesta Industrial de CAME que se realiza mensualmente entre 300 pymes industriales de todo el país.
De los 11 rubros relevados, cuatro crecieron en la comparación anual, seis cayeron, y sólo uno se mantuvieron sin cambios. Si bien el 43,9% de las empresas consultadas creció, todavía no mejora el clima de consumo en el mercado.
En el análisis por tamaño de las empresas, el relevamiento mostró que mientas las más pequeñas aún caen, las medianas comenzaron a recuperarse. Aquellas con menos de 50 empleados tuvieron una caída anual de 2,4% en su producción (comparando enero 2020 vs. enero 2019) y aquellas con 50 empleados o más volvieron a registrar un aumento de 1,9% anual.
En cuanto a los sectores, los que más crecieron el primer mes de 2020 fueron: “Alimentos y bebidas” con un alza de 0,2%; “Calzado y marroquinería” con 1,9%; “Productos químicos” con 11,9%, y “Productos textiles e indumentaria” con 2,3%. Se mantuvo sin variación “Productos de caucho y plástico”.
En cambio, cayeron: “Minerales no metálicos” con un descenso de -8,9%, “Material de transporte” con -6,7%; “Productos electro-mecánicos, informática y manufacturas varias” con -2%; “Papel, cartón, edición e impresión” con -0,1%; “Maderas y muebles” con -4%, y “Productos de metal, maquinaria y equipo” con -2,3%.
En tanto, durante el primer mes del año volvió a subir el porcentaje de empresas con rentabilidad positiva, a 44,1%, y bajó a 19% la proporción de industrias con rentabilidad negativa (de 21,8% en diciembre). No obstante, aún queda mucho por mejorar en materia de rentabilidad para que la industria argentina vuelva a ser sostenible.
Un factor que incide en la rentabilidad es el deterioro en la cadena de pagos. En enero, el plazo promedio al que las industrias recibieron cheques fue de 42 días, muy largo frente a las necesidades de liquidez de las empresas y las tasas de descuento por cambiarlos.
El uso de la capacidad instalada, en tanto, subió 1 punto, de 62,7% en diciembre a 63,7% en enero, reflejo de que todavía no hay un rebote en la producción. Los sectores que están trabajando con menos porcentaje de su capacidad instalada fueron textil (53,2%) y calzados y marroquinería (57,5%).