“La situación actual del sector de diálisis es desesperante”, aseguró el presidente de la Cámara Argentina de Servicios y Productos de Terapia Renal Carlos Mendieta.
La Cámara Argentina de Servicios y Productos de Terapia Renal le reclama al Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires el pago de la deuda millonaria que el programa “Incluir Salud” mantiene desde hace más de 8 meses con los centros de diálisis, y además la actualización del valor del módulo, para poder seguir prestando un servicio de calidad que asegure la vida de los pacientes.
Los prestadores privados sostienen que la deuda asciende a más de $480 millones, la falta de políticas y el desfasaje de los valores de los módulos. Esta situación no sólo la padece la provincia de Buenos Aires, sino que también se repite en Misiones, Salta, Chaco, Rio Negro, Santa Cruz, Corrientes, Santiago del Estero, entre otras.
Estos abultados costos se agravan con el impacto inflacionario, el atraso en la cadena de pagos (los proveedores ya no pueden seguir acompañando la situación de atraso), los gastos para el sostenimiento de los centros (impuestos, pago de servicios, sueldos, etc.), que NO van de la mano con el aumento del valor del módulo; lo que hace insostenible la situación de los prestadores, quienes deben continuar brindando un servicio de calidad a los pacientes porque de ello depende su vida.
“La situación actual es desesperante. Ya no podemos sostener más. Necesitamos respuestas urgentes de las autoridades provinciales que se traduzcan en el pago de la deuda millonaria que el estado mantiene con los centros y una actualización del valor del módulo para que podamos seguir operando bajo los estándares de calidad y bioseguridad que la práctica médica requiere”, aseguró Carlos Mendieta, presidente de la Cámara Argentina de Servicios y Productos de Terapia Renal.
En Argentina, el sector de Diálisis tiene grandes erogaciones: insumos importados con precios en moneda extranjera, gran cantidad de recursos humanos, transporte de pacientes cubierto por los centros, controles médicos y vacunación, suministro de materiales descartables, cirugías y trámites para gestionar la inclusión en lista de espera para trasplantes.
