En el marco de la Cumbre de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que arranca esta semana en Nueva York, se dió a conocer un estudio científico publicado en la revisa Science, que muestra las ventajas económicas de invertir en la mitigación y adaptación a la Crisis Climática.

El trabajo, que puede leerse completo aquí fue liderado por el Profesor Ove Hoegh-Guldberg del ARC Centre for Excellence in Coral Reef Studies de la Universidad de Queensland en Australia y contó con la participación de la Dra. Inés Camilloni, profesora de la Universidad de Buenos Aires e investigadora en el Centro de Investigaciones del Mar y la Atmósfera  dependiente de la UBA y el CONICET.

«Durante las próximas décadas es esperable que los costos asociados a limitar las emisiones responsables del cambio climático serán mucho menores a los de los daños que éste podrá producir sobre las personas, la infraestructura y los ecosistemas», afirman los investigadores. 

El trabajo realiza una actualización acerca de los impactos del cambio climático demostrando que existen beneficios significativos si se evita un calentamiento del planeta de 2ºC  y se logra restringirlo a 1.5ºC con respecto al nivel preindustrial. “La acción frente al cambio climático representa un buen retorno de las inversiones necesarias cuando se consideran los daños evitados. Estas inversiones son más que necesarias dada la magnitud de la evidencia de que los impactos del cambio climático están ocurriendo en forma más acelerada y extensa que las proyecciones realizadas hace sólo unos pocos años. Esto hace que la necesidad de reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero sea imprescindible y urgente” indica la Dra. Camilloni.

A partir de la entrada en vigor del Acuerdo de París, se han multiplicado los esfuerzos para cuantificar los beneficios de limitar el calentamiento global a 1.5ºC con el objeto de proveer a los decisores políticos de la información para el diseño de estrategias para hacer frente al cambio climático.

De no implementarse estas políticas, continuaremos en la espiral ascendente de incremento de utilización de combustibles fósiles y deforestación que expandirán la degradación en gran escala que están sufriendo los ecosistemas.

Un reporte reciente de las Naciones Unidas proyecta que un millón de especies se encuentran en peligro de extinción durante las próximas décadas y siglos donde el cambio climático es uno de los factores responsables de este riesgo. 

Los autores del artículo señalan que la acción climática es imprescindible dada la vulnerabilidad de los Estados Insulares, de los que tienen la mayor parte de su territorio cercano al nivel del mar y de aquellos países en desarrollo que en todos los casos podrán verse fuertemente afectados en su crecimiento económico en ausencia de políticas ambiciosas de mitigación. 

El año 2020 será central en términos de acción climática destaca la Dra. Camilloni ya que será la oportunidad de incrementar la ambición en las contribuciones de reducción de sus emisiones de gases de invernadero de cada nación, en línea con lo acordado en París en 2015.

Hacer frente al cambio climático es una tarea exigente pero no hay alternativa desde la perspectiva del bienestar de la humanidad dado lo mucho que se pone en juego de no actuar en forma urgente, concluyen los autores del trabajo.

Fuente: Periodistas por el Planeta